¡Hasta pronto, Barcelona!

Hace nada estaba soñando con los 2 meses que iba a pasar en Barcelona y ahora resulta que ya han pasado y no sólo eso, sino que siento que han volado sin apenas darme cuenta. Todavía recuerdo cuándo llegué el 27 de Noviembre por la mañana y tuve la suerte de dar con un taxista muy agradable que me aseguró que Barcelona me engancharía. No le faltaba razón (aunque admito que es una ciudad que me tiene enamorada desde que la vi por primera vez en Octubre del 2007. Desde entonces significa mucho para mí, mucho, porque lo hice en compañía de mis padres y fue el último viaje que hice con él. Eso, como os podéis imaginar, marca). Una vez aquí, me instalé y al día siguiente ya tenía planes con Eva, que vino a por mí y me llevó a ver casi todas las vistas posibles de Barcelona para terminar comiendo al lado de la playa. Fue un domingo genial, donde instauramos sin darnos cuenta la que a partir de ahora será nuestra tradición del "bocata de manchego y el café con leche en las nubes".

Al día siguiente, el 29/11, era el partido Barça-Madrid que terminó con el famoso 5-0 y tampoco olvidaré cómo según iban metiendo goles al R. Madrid yo pensaba: "Que no les metan más, por favor, que mañana me presento en el ICO..." No es que sea muy futbolera ni mucho menos, pero una es madrileña y... El caso es que al final, aunque hubo alguna broma, fueron pocas y simpáticas, podría decir que ha sido algo que me ha unido más todavía a esta ciudad y su gente, me he reído mucho a costa de ello! (si es que está visto que no hay mal que por bien no venga!)

Luego la semana voló y llegó el viernes 3/12 con la famosa huelga de controladores aéreos. Mi prima venía a verme el sábado y nunca olvidaré ese día que me llevó a escribir esta entrada "Reflexiones tras un día complicado" y a conocer un poco más a la que se ha convertido en una buena amiga, Rut. Por suerte finalmente pudieron venir y pasé un gran puente que enseguida se unió con el siguiente fin de semana, que fue muy especial por las visitas que recibí , el paseo turístico con Mónica, la mejor guía que podíamos tener, con esa parada en Santa María del Mar que siempre tendré grabada en mi memoria por muchas cosas, y la cena del 11/12.

Mientras iba descubriendo poco a poco en el ICO el maravilloso mundo de la braquiterapia, pasaron los días y llegó la Navidad que pasé entre Barcelona y Segovia. En la 2ª sólo estuve el fin de semana de Año Nuevo y admito que, aunque pensaba que pasar los Reyes sola no iba a costarme tanto, cuando me encontré sola esos días no lo pasé demasiado bien y acabé escribiendo "La soledad es buena... a ratos"

Antes había escrito "El 11..." donde explicaba lo poco que me gustaba ese nº por las cosas que le asociaba y mi propósito de cambiar eso este año, entonces llegó el primer 11 del año, el 11/1/11 y me encontré con la magia de Twitter. Fueron tantas muestras de cariño que recibí que consiguieron que fuera un día muy especial, de esos que se cuentan a los nietos, y me llevaron a escribir: "Primer 11 del 2011"

Desde entonces hasta hoy he seguido formándome en el ICO, he tenido mis días buenos, mis días regulares y mis días malos. Y el 21/1 , Mónica, Merce... me organizaron una despedida que hizo que me sintiera muy afortunada porque muchas de las personas que he conocido por Twitter han pasado de ser amigos 2.0 a ser amigos 1.0 y eso es genial. Nunca me cansaré de decir que recibo mucho cariño, a veces inmerecido, y siento que tengo muchísima suerte por ello, de verdad.

Como he ido diciendo en el 365PhotoTuits ahora necesito volver a mi ciudad, mi casa, con mi familia y amigos de toda la vida, pero aquí he hecho grandes amigos, he tenido la suerte de dar con buenos compañeros y, en fin, a pesar de mis días tristes, mis desilusiones/decepciones… me llevo muchas cosas de esta ciudad y una experiencia que nunca olvidaré.

Todo llega, las etapas se van cerrando y mañana se termina otra… Me encuentro llena de sentimientos contradictorios, triste pero contenta, pero me quedo con todo lo positivo que me han aportado estos dos meses aquí, que recordaré siempre.

Estoy muy agradecida por todo lo bueno que me han dado en este tiempo, que ha sido mucho. De verdad, Barcelona se ha hecho un hueco muy importante en mí y siempre será especial. Como me decían esta tarde, si ha sido así no ha sido sólo porque se trate de una ciudad que enamora sino porque tiene una gente que me ha recibido con los brazos abiertos y de la que sólo he tenido muestras de cariño. Ahora sé que siempre va a estar muy presente en mi vida y, aunque ha llegado el momento del adiós, éste, más que un adiós, es un ¡hasta pronto!. Sé que volveré no tardando mucho y no será sólo por cursos, congresos... lo haré en viajes personales, que me permitan de disfrutar de la ciudad y su gente, porque quiero verla y quiero veros, de verdad, ¡GRACIAS!

"Se despidieron y en el adiós ya estaba la bienvenida" Mario Benedetti