miércoles, 26 de octubre de 2011

No me lo digas


Hace unos días hablábamos de la controversia que existe entorno al PSA como screening en el cáncer de próstata y hoy de nuevo un buen amigo nuestro nos ha hecho llegar este artículo de The New York Times: 


Os recomiendo que lo leáis, merece la pena y tiene la mejor conclusión que podía tener:

"More testing inevitably brings more treatment, because the urge to correct every cellular anomaly, no matter how small or potentially harmless, is practically irresistible. But if there is one lesson from the P.S.A. test, it is that more information and intervention do not always lead to less suffering"

Si hacemos más pruebas de cribado (screening), éstas traerán consigo más tratamientos. Da igual lo pequeños o potencialmente inofensivos que sean los cánceres que se diagnostiquen, tratarlos es prácticamente irresistible. Es más, si te diagnosticaran un cáncer (como en este caso de próstata), ¿te quedarías a gusto si no te lo trataran, por mucho que te dijeran lo "bueno" que es?

De ahí la pregunta que se plantea al principio:

"¿Tengo cáncer? No me lo digas "

Una vez diagnosticado, dejar de tratarlo es difícil, pero como dice, "más información e intervencionismo no siempre conducen a un menor sufrimiento"

¿Deberíamos perder el miedo y abandonar el PSA como screening del cáncer de próstata? Pero, si acabas teniendo un cáncer de próstata avanzado, ¿culparás a que ya no te hacen el PSA?

En fin, la clave está en perder el miedo, ¿no creéis? 




8 comentarios:

  1. Si, pero ¿¿cómo perder el miedo??

    La de veces que he oído, prefiero no hacerme ninguna prueba, por si encuentran algo...

    Muy buena reflexión Tere.

    ResponderEliminar
  2. Lo sé, lo sé, es muy difícil y cada vez más... pero hay momentos que siento cierta envidia hacia esos abueletes que no han ido nunca (o casi nunca) al médico y han sido tan felices, sin mil pruebas y diagnósticos que a veces no consiguen nada más que meternos en un mundo de tratamientos que a veces poco consiguen...

    Ufff! Se salvan muchas vidas pero antes, los abuelos de 85 años enfermaban y morían y era "ley de vida" pero ahora no se quedan sin un diagnóstico, mil pruebas y, en numerosas ocasiones, tratamientos muy duros... uf! Qué difícil es todo!!!!

    Un abrazo enorme y muchísimas gracias por comentar!!!!

    Muuuuuuuuuuuaks!!!!

    ResponderEliminar
  3. Muy difícil perder el miedo. En general todos tenemos terror a la palabra cáncer y lo que implica: pruebas, tratamientos duros, sufrimiento y en ocasiones muerte.
    La reflexión es buena y la pregunta ¿hasta donde? de difícil respuesta; al menos yo no la sé.
    Un besazo Tere

    ResponderEliminar
  4. Imposible perder el miedo. Que te digan algo así da miedo. Mucho miedo.

    Que a veces nos pasamos de previsores, pues también.

    Difícil reflexión Tere, me pregunto lo mismo que Javier ¿hasta dónde?

    Gran post y gran elección musical. Quizás la música nos haga perder algo de miedo.

    ResponderEliminar
  5. Javier, yo tampoco sé la respuesta y no paro de planteármela... uf!
    Un besote enorme!!!!

    Pilar, wapa!!! Y que lo digas, estas cosas dan miedo, mucho miedo. Pero sí que se puede perder, lo sé porque he visto cómo se pierde. ¿Que yo pueda conseguirlo? No sé... realmente hasta me pregunto si lo tengo o a veces soy demasiado "bruta" con lo que pienso sobre mí.
    Un abrazo enoooooorme!!!!

    ResponderEliminar
  6. Buenas noches
    Pues yo creo que la clave no está en perder el miedo sino en elegir qué miedo preferimos tener o nos resulta más fácil de gestionar.
    Y será uno u otro en función de las experiencias de cada uno, sus circunstancias, su personalidad...
    Creo que deberíamos ser capaces de estratificar a los pacientes según su empoderamiento (?) y su health literacy e incluso su riesgo estimado para trasladarles la información adecuada que les permita elegir.
    No me parece correcto que les "impongamos" nuestros criterios personales, que decidamos por ellos.

    ResponderEliminar
  7. Hola Blanca! Qué alegría leerte por aquí de nuevo!!!

    Tienes razón, puede que sea más decidir qué miedo preferimos tener o llevamos mejor... pero...

    Lo de gestionar la información que les damos a los pacientes para que puedan elegir me parece muy bien, pero es muy complicado y no sólo eso, sino que no sé porqué pero acaban con el: "doctora, usted qué haría?" Y ufffffffffffff!!!! :((((

    Un besote enorme!!!!!

    ResponderEliminar
  8. Hola
    Estoy de acuerdo, dar la información adecuada es complicado, pero creo que merecería la pena.
    También creo que cuando dicen el "doctora, usted qué haría?" lo que quieren decir es : "usted es la que sabe". Y por supuesto que es así, además de implicar la confianza que tienen en tu criterio. Pero en cuestiones como screening sí o no, de ésto o lo otro, ahora o en otro momento...pienso que deberíamos ser capaces de transmitir ese conocimiento "a su medida".
    Hace poco tuve ocasión de ver en una TV francesa cómo informaban sobre la disparidad de conclusiones de los estudios sobre riesgos y telefonía móvil. Admirable: fueron claros, concisos, veraces...quienes lo vieron recibieron la información adecuada para sacar sus propias conclusiones y actuar en consecuencia.
    Besos

    ResponderEliminar